El día empieza con un largo descenso por la carretera que va de Benasque a Campo, 9km de curvas para ir aclimatando las piernas. Llegamos a la presa y “venga para arriba”, de nuevo por carretera hasta Senz y Viu de Foradada, donde cogeremos una pista de infierno: piedras, piedras y más piedras. Subida de 6km para alcanzar al collado de Cullivert y de ahí, pues otra vez para 
abajo por pistas también llenas de piedras, alternando falsos llanos…donde se puede disfrutar de unas vistas increíbles de la Peña Montañesa y la Sierra Sarnera.Seguimos descendiendo, hasta enlazar con una pequeña trialera para aparecer en el pueblo de la Lafortunada (control 3). Ahí saludamos a nuestros compis de ruta que estaban papeando de lo lindo y encaramos una subida de 18km por carretera, cruzando túneles infernales (suerte de las luces frontales que adquirimos el último día en Pont de Suert). Al lado del rio Cinca, giramos por el desvío que nos llevará a Plan por pendientes fuertes y mas túneles de infierno, hasta que al final divisamos a lo lejos el pueblecito de Plan (no iba ninguna caravana de mujeres, jajaja).
De un encanto inexplicable en el cual nos hospedamos mediodía en el hotel del control 4, siendo éste una maravilla…limpiamos las mtb’s, tareas varias y nos vamos a remojar al río que tenía un agua bien fría y así aliviar gemelos y demás (donde nos toca peleamos con una serpiente, jejeje)
A partir de aquí, la ruta va a cambiar a nivel de paisajes y terrenos, pasaremos de terreno seco y pedregoso al verde y húmedo, para finalizar un día duro.
Pedaleando: Judith y Xinés.
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